martes, 22 de diciembre de 2009

Preguntas y respuestas

Hoy es uno de esos días en que me estoy haciendo preguntas sobre cosas... cosas cuya respuesta puede ser dolorosa, por eso, quizás, no acostumbramos a ocupar tiempo en planteárnoslos ya que sabemos que al final el día acabará peor de lo que empezó.

Quizá me las planteo por tener tanto tiempo libre... Los amigos, los cambios, la felicidad o los momentos felices, las personas, la falsedad. ¿Quién no sufrió por alguna de estas cosas o por la falta de ellas...?

Qué miedo, qué miedo porque llevo como un año tratando de encontrar la estabilidad perfecta, la felicidad... y cuanto más la busco y me empeño en plantarla en mi vida, más lejos se va.

Personas, ¿cuantas personas entran en tu vida? muchísimas. Y cuantas de ellas nos gustaría que permaneciesen para siempre... Y fuerzas, fuerzas las cosas y te engañas, intentas creer que todo sigue como cuando las conociste, que era una sonrisa tras otra...

Y llegan los cambios, aquellos que a algunos les gustan y a otros no. Ves como todos a tu alrededor cambian y tú no quieres... te niegas. Y no entiendes e intentas buscar respuestas a porque la gente que más quieres, se aleja sin importarle nada. ¿Que he echo mal?

Alguna cosa debo hacer mal para que solo sea un suspiro en la vida de la gente que para mi es importante. Quizás es la vida, que es así, que la vida son cambios y parece que soy la única en la tierra que no quiere que nada cambie.

Y mientras... ¿que hago? ¿Pataleo como una niña pequeña exigiendo que todos los que quiero tienen que estar en mi vida? ¿O hago como el resto del mundo y poco a poco voy dejando atrás recuerdos y personas importantes? Al final... nos volvemos todos egoístas y solo nos importa nosotros mismos y nuestro ombligo. Y el tiempo que ocupo en plantearme todo esto, la vida sigue pasando y si antes me sentía sola, ahora más.


1 comentario:

Victoria dijo...

Cuando te leo me doy cuenta de la responsabilidad que supone ser tu madre.
Son tantas las reflexiones que comparto que me pregunto qué sentirás tú cuando tengas mi edad.
La vida está llena de preguntas, de respuestas, de preguntas sin respuesta. Muchas no nos gustan, lo sé, pero si las tienes claras, si no te dejas engañar ni por ti misma, siempre sabrás donde poner el pie antes de dar un paso.